Aprender a hacer algo

por sí mismo fue

su mejor medicina.

Peter Orsag, Ámsterdam

La felicidad estaba en el amarillo

La meta de Peter era ser un auténtico tiburón de las finanzas, hasta que el estrés y la ansiedad del trabajo acabaron afectando a su salud. Para volver a sentirse como antes, Peter recurrió a Los Simpson.

A partir del Brexit, Ámsterdam se ha convertido en el principal centro financiero de Europa. Por ese motivo, es una de las ciudades más apasionantes para trabajar en el mundo de las finanzas. Como gestor de proyectos, Peter colaboraba en iniciativas importantes de gran impacto. Sin embargo, eso le hacía sentirse responsable de todo: "Si algo salía mal, me echaba la culpa". Llegó el punto en que la presión de ese entorno tan voraz pudo con él. Empezó a sentir que su vida era cada vez más como gritarle al vacío y no obtener respuesta.

De repente, un día, Peter no encontró las fuerzas para levantarse por la mañana, de manera literal. Le era físicamente imposible hacerlo. El diagnóstico: burnout, o síndrome del trabajador quemado, causado por un estrés permanente. Peter tenía que hacer algo. Se tomó un tiempo libre, inició un tratamiento médico y se puso en manos de un coach profesional, que le recomendó buscarse un hobby que lo ayudara a encontrar de nuevo su equilibrio interior, una afición que pudiera hacer él solo, sin conexión a Internet.

La historia de Peter

Como gestor de proyectos en una empresa del sector financiero, Peter sufrió un verdadero estrés laboral. En el vídeo nos cuenta cómo logró recuperarse al dedicar su tiempo libre a un hobby creativo.

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La pintura como terapia

Dibujar personajes de Los Simpson fue lo primero que se le ocurrió a Peter. Recuerda exactamente cuándo empezó a ver esta serie de niño en República Checa. Cuando dibuja, todo lo demás desaparece a su alrededor. Para él, es una forma de meditar. "Me ayuda a distanciarme de los problemas de los demás y centrarme en las cosas que sí están en mi mano y que puedo disfrutar", nos explica mientras trabaja con los marcadores acrílicos.

Cuando dejó de intentar complacer a los demás, el resto vino solo. Un día, uno de sus dibujos se hizo viral, ¡e incluso alguien se lo tatuó! Aun así, no se considera una persona especial, solo un chico al que le gusta dibujar personajes de su serie favorita. ¿Pero qué le gustaría transmitir a otros creadores? "Si piensas que puedes hacerlo, es que puedes hacerlo. ¡Solo tienes que dar el primer paso!"